jueves, 25 de noviembre de 2010

La idea Progreso en George Méliès


La semana pasada, en el colegio, tuve que trabajar la idea de Progreso (estamos en la unidad Balance del Mundo Moderno), y para ello utilice la película Le voyage dans la lune de Georges Méliès. Esta película es del año 1902 (7 años después de que los hermanos Lumiére mostraran la llegada de un ferrocarril a la estación) y podemos decir que es el primer film de Ciencia Ficción de la historia.

¿Por qué utilizar esta película? Pues bien, simplemente porque nos grafica cómo la idea de progreso se manifiesta ya no sólo en la literatura sino que también en este nuevo invento cómo es el cine. El futuro se piensa como aquel tiempo en donde los avances tecnológicos podrán hacer que todo sea posible, la confianza del hombre hacia el hombre permite pensar en explorar otros mundos, otros espacios, permite el desarrollo, la plenitud y la felicidad del hombre. El avance tecnológico permite ante todo imaginar, imaginar futuro con más comodidades y conocimientos.
En cuanto al trabajo con los alumnos, la recepción de la película en chicos de 13-14 años fue buena, a pesar de que esta fuese en blanco y negro, y bastante poco nítida sus imágenes. La actividad consistió primero en imaginar el camino del colegio a la casa y en un momento específico (en mi caso salir del ascensor) toda la ciudad había cambiado porque se encontraban en el 3010. ¿Qué vieron?¿Qué tecnología había?¿Cómo era la ciudad, los hombres, la naturaleza?.. Luego de hacer una recolección de las concepciones sobre el futuro se pasó a una segunda actividad que consistió en observar la película y anotar todo aquello que llamara la atención de los alumnos, es importante no decirles en que se deben fijar porque así abre más posibilidades de observación y se evidencian las preferencias de los alumnos sobre unos temas más que otros. Entre las cosas que señalaron luego de ver el film se habló de los personajes (astrónomos) y la sala donde estaban conversando, la contaminación en la ciudad provocada por las industrias, los avances técnicos como la bala que lleva a los hombres a la luna y cómo las leyes de la naturaleza no se hacen visibles en la película.

Al preguntarles que le pareció el film, me llevé una gran sorpresa. En su mayoría los alumnos, y de forma categórica, dijeron que “la película estaba mala”. ¿Por qué mala? Los chicos no tomaron en cuenta el periodo en que se hizo la película, sino que sólo consideraron sus conocimientos previos sobre el (real) viaje a la luna en 1969, como por ejemplo el tema de la gravedad, la ropa de los viajeros espaciales, que los astronautas son los que viajan no los astrónomos, que un cañón no tenía la fuerza necesaria para enviar una bala fuera de la tierra… Sin embargo al plantearles que sus ideas sobre el futuro pueden estar igual de erradas asimilaron que el futuro es una construcción en base a lo que tenemos en el presente y en relación a lo que podemos hacer con este, independiente si efectivamente será así. La idea de progreso nos permite eso, imaginar el futuro con mega avances tecnológicos como televisores con olores y autos voladores, ahora lo que pase entre el 2010 y el 3010 depende aún de la confianza del hombre en superar sus propias impresiones sobre el futuro y hacerlas parte del presente.


jueves, 18 de noviembre de 2010

Duérmete niño, duérmete ya, que viene el cuco y te comerá…
Me resulta inquietante pensar por qué para hacernos dormir cuando niños nos asustan con el cuco o con el viejo del saco, personajes populares a los que nos sentimos indefensos al saber que ellos vendrán a comernos o llevarnos (en el mejor de los casos).
Los primeros registros que se tienen de este tipo de cantos nos remontan al siglo xvii y se encuentra en la obra dramática de Juan Caxés llamada  Auto de los desposorios de la Virgen. Sin embargo, más que su procedencia lo llamativo de este maligno ente –llamado de distintas maneras dependiendo del lugar- es que no sólo los niños latinoamericanos deben lidiar con esas amenazas para dormir, comer o portarse bien (pensando que Latinoamérica es un lugar de realismo-mágico creería que es un fenómeno propio), Sandman es el terror para los pequeños anglosajones.
Parece ser que el miedo infantil hacia el cuco o sandman es responsabilidad de los padres que por tradición –y poca imaginación- nos cuentan los mismos cuentos para poder conseguir algo. La oscuridad, por tanto, no es el principal miedo de los infantes, sino que todo lo desconocido que ello implica. Es aquí donde empezamos a hablar de los arquetipos, aquellos contenidos del inconsciente colectivo que nos son familiares. O sea que, temer a la presencia del cuco, del viejo del saco o de sandman forma parte no sólo de los miedos individuales, sino que –y con mayor ímpetu- de los colectivos, aquellos de naturaleza universal. De ahí que niños de Latinos y anglosajones sufran noche a noche por la llegada del cuco antes de dormir...
Me pregunto cómo se llamará este personaje popular en países africanos, asiáticos o de medio oriente ¿Será realmente un arquetipo del miedo? ¿Cómo acercarnos a la historia del miedo? ¿Pueden todos los niños del planeta tenerle miedo al mismo hombre que se los llevará, comerá o sacará los ojos?
Paul Berry nos presenta en The Sandman (1992, animación en stop-motion) cómo un niño amenazado por la noche (y no me refiero al disque grupo musical chileno) y por sandman debe llegar a su cuarto para dormir. En un ambiente más que tétrico y expectante el director nos traslada a los miedos que creímos olvidado. ¿Aún creen que vendrá el cuco por ustedes? 

sábado, 13 de noviembre de 2010

El Octavo pasajero de la Santa María.

Hay una distinción básica, pero que es siempre buena tenerla en cuenta al momento de hablar de Cine, esta es la diferencia que hay entre argumento e historia. Por una parte, el argumento es la idea que  quiere  comunicar, mientras que la historia en una película es  como se desarrollan los hechos, así varias películas pueden tener el mismo argumento, pero son pocas las películas que cuentan la misma historia (hay películas que son hechas varias veces o historias que son llevadas al cine por más de un realizador).
Teniendo esto súper claro podemos ver como el encuentro con el otro pasa a ser el argumento de varias películas, y en especial las que hablan de la conquista de América.
Es con ese argumento que aparece en 1992, junto con los 500 años del viaje de Colón, Ridley Scott estrena “La Conquista del Paraíso”. El director Británico que todos conocemos por sus películas de época, nos cuenta la historia de Colón y su viaje (con imprecisiones y todo lo que quieran, pero lo hace). La película fue un éxito de taquilla y muchos hemos tenido el placer de verla en enseñanza media cuando se toca el tema de la expansión europea.
Pero ésta no era la primera vez que Ridley Scott nos cuenta sobre el encuentro con el otro, unas décadas antes el director se embarcó en un proyecto casi tan ambicioso como realizar una película de Colón en la conmemoración de los cinco siglos de este viaje. Con la ayuda de renombrados artistas visuales (H.R Giger, Jean Giraud,  y otros)  Scott miró hacia el cielo, hacia el futuro y con la frase promocional de “En el espacio nadie escuchara tus gritos” se estrena “Alien, el octavo pasajero”(1978). El encuentro con el otro en un espacio desconocido aparece nuevamente como argumento, en una historia de terror ambientada en una nave espacial y que se transformó en un clásico del  género con varias secuelas.
Así Scott, un director por cierto más taquillero que artista, aunque tiene varios premios  Oscar que son en cierta medida premios a la venta de ticket, nos habla sobre el miedo al otro y el trauma del encuentro con lo desconocido,  esto en la representación de un hecho histórico o en la especulación sobre la última frontera.
Así que les dejo planteadas las preguntas, ¿Encuentra algo en común en ambas historia?, ¿Creen que comparten su argumento?, ¿Quién es el mounstro en el siglo XVI?
Por último recuerden que en el espacio y en la selva nadie los escuchara gritar.